De (IN)utilidad pública
1. Las FF.AA. en Chile
"Volar. Dormir. Indignarse"
Si vive en Santiago de Chile y está pensando en echarse una reponedora siestecita durante estos días de tregua estudiantil o laboral.... ¡ Ni lo intente !
Sepa Usted que estamos ad portas de la Parada Militar. Eso, para gu$to y de$caro de nuestras gloriosas, ilustrísimas y gallardas fuerzas desalmadas. (Sorry. He querido decir fuerzas armadas). Y ojo, que llamarles fuerzas armadas, en el caso de este belicista terruño no se antoja metafórico. Cuando digo armadas.... es que lo están. Hasta los dientes, el prepucio y el duodeno. O hasta donde haga falta o hasta donde se haga flaite.
Sabido es que a próceres de antaño se les ocurrió tutearse con la autoreferencia y, para ello, nada mejor que ofrendarse a sí mismos con un día de fiesta y despilfarro. "Ah, ¿que un día le parece poco? Pues nada: entonces, una semana. ¿Insuficiente? Joder con estos soldaditos. Ni modo: "mariconadas, las mínimas...." ¡Un mes! Venga ya. Un mes entero de barra libre.... Que para eso el Estado paga...."
De ese modo, y durante 30 días, chilenitos todos presumiendo de fondo de arma-rio....
Cada año, desde el 20 de agosto (el natalicio de Bernardo, el ecuestre) y hasta la convocatoria a marchar del 19 de septiembre, (a día de hoy, acaso la única marcha no convocada por Camila) el sentimiento genuinamente patrio se adereza y se mide a través de ese marcial y modesto acontecimiento pre-bélico. La autorización ya está, por tanto, cursada. Tal vez no vaya demasiada gente al Parque O'Higgins como hace un par de domingos. El Alcalde de la Comuna de Santiago, seguro que sí acude. Eso, para el cloacal y facistoide gusto de LUN que, esta vez titulará algo parecido a "Zalaquet sí movió la colita".
En fin. El ruido, francamente, es infernal. A cada incursión aérea monitoreada desde la base de El Bosque, le sigue el venial ruido de las alarmas de los coches que se activan instantáneamente. El bebé del Quinto se ha despertado y llora que te cagas. Hay quien desde uno de los balcones se atreve a reclamar vociferando hacia el cielo. "Milicos culia'os...." Un chirrido ensordecedor, ostentoso y aeronáutico lo ridiculiza. El hombre, malhumorado, da la media vuelta y se encierra. Echan a temblar, apenas equilibradas, todas las macetas del edificio. El ruido no decae. Sí. El ambiente sucumbe a lo estentóreo; todo se contamina. Contaminación acústica le llaman algunos. En Chile, contaminar es gratis. Incluso es bien pagado. Llevo un rato largo escribiendo. Ya me he resignado. La retahíla del capitán ávalos puede más que mi empeño y que mi cansancio. Arriba, el bebé no deja de llorar. Parece sumarse al enfado de aquel vecino. Escupe el chupete. Desde su boquita sin dentadura y, en una especie de dialecto muy suyo, deja escapar algo que traduzco como otro "milicos culia'os...."
Azucarillos de paciencia, infusiones de tila. Prospectos de buen humor. Ya queda menos. (Aunque lo peor). Llegada la primavera se pirarán los top-gunes criollos. Viene bien darle una vuelta de tuerca a las cosas. Me asomo por la ventana con ánimo masoquista. Por lo de los avioncitos que no descansan y porque intento distraerme hojeando un ejemplar de LUN que he cogido de la pescadería.
El hombre de hace un rato, vuelve a asomarse al balcón y, dispuesto a dar pelea, grita:
-Ahora mismo sobrevuela el cielo capitalino una ruidosa flota conformada por hospitales, escuelas, viviendas, bibliotecas, gimnasios y un sinfín de "incidentales artilugios de poca monta", llamados Necesidades Sociales Básicas por los retrógrados de siempre....
-¡Bah! ¿O es que acaso se trata de "mirages" y de "hawckers"? -le contesta, solidario, un sexagenario vecino desde la izquierda-. Usted dice ver eso sólo por marear la perdiz. ¡¡¡ Mire, mire nada más hacia el cielo....!!! Si en este preciso instante va pasando la Camilita Vallejo haciendo toda clase de piruetas y contoneos....
Yo, mientras tanto, sigo a mi bola y vuelvo a quedarme lelo con la portada de LUN. La imagen es sencillamente deliciosa. El titular, tan amarillista como indignante.
Hay quien dice:
El cielo es el patio de los pájaros....
Yo, junto con adherir a ello, digo:
Y en Chile, no tienen patio todos los colegios....
( C. O., frustrado dormidor de siesta....)
( Claudio Olivos - Septiembre 15 de 2011 - San Miguel, Santiago de Chile )